15 de septiembre de 2024/Texto y fotos: Patricia Prudencio Muñoz
Nava de la Asunción celebraba un interesante corrida de toros mixta en la que el rejoneador Sergio Pérez de Gregorio y los matadores de toros Joselito Adame y Javier Cortés se midieron a los ejemplares de la ganadería de Luis Albarrán. Los animales dieron juego y opciones para el triunfo, aunque con sus teclas, en una tarde en la que la terna abrió la Puerta Grande. Sergio estuvo firme con el primero un toro que se vino a menos. Al cuarto le cortó las dos orejas en una actuación de transmisión y un buen rejón de muerte que le valió las dos orejas. Joselito Adame, encontró un lote bastante completo, se asentó con el segundo de la tarde al que tuvo que llevar muy tapado y toreado, fue noble pero sin demasiada transmisión. El quinto fue un tira y afloja continuo por mantenerlo, dejando muletazos de mucho mérito. Cortés los llevó en largo y con profundidad, encontrando mayor expresión al natural.
Sergio Pérez desluce con los aceros
Sergio Pérez abrió la tarde saludando al abreplaza, un toro que se fue apagando. Trató de encelarlo en los medios para lucirse hasta dejar el primer rejón de castigo. Cambió a banderillas, pero su actuación parecía no terminar de tomar vuelo. Culminó con las cortas pero ya a toro parado, teniendo que hacer todo Sergio Pérez. Se le complicó el rejón de muerte.
Firmeza de Joselito Adame que encuentra acople por el pitón derecho
Joselito Adame deleitó con variedad y lucimiento en su saludo capotero al primero de su lote y segundo de la tarde. Inició la faena entre probaturas para sacarlo al paso a los medios. En aquellos terrenos se asentó con el animal y empezó a torearlo en una primera tanda ligada por el pitón derecho. El de Luis Albarrán era noble, pero le faltaba un punto de transmisión, además, había que llevarlo muy metido, muy toreando, pasando sin terminar de humillar, obligando al mexicano a pasarlo a media altura. Lo mostró también al natural, pero el acople lo encontró por el derecho. Tuvo que descabellar.
Javier Cortés expresión al natural
Javier Cortés no pudo estirarse en su capote con el tercero de la tarde, algo que sí pudo hacer en el quite, que remató por abajo y con mucha torería. El inicio de faena fue explosivo, metiendo de lleno a la afición. Continuó por el derecho, con un toro que parecía seguir la tela con fijeza, permitiéndole la ligazón a la serie. Sin embargo, no podía tocar la tela, por lo que obligó a Cortés a parar y recomponer para templarno y limpiar los muletazos. Le costaba atender al primer cite, pero una vez dentro lo envolvía para llevarlo y vestir el muletazo. Al natural lo llevó largo y por abajo, estirando la embestida. Culminó metido en tablas y entre pitones.
Sergio Pérez corta dos orejas al cuarto
Sergio Pérez salió con actitud y determinación para dejar dos rejones de castigo al cuarto de la tarde. Cambió a las banderillas en las que buscó en todo momento la conexión con los tendidos, por lo que encontró un público entregado. Hundió los palos tras varias pasadas en falso, pero asegurándose en el sitio. Culminó con las cortas y unas rosas en las cercanías ante un toro que le brindó mayor movilidad y transmisión. Dejó un buen rejón de muerte.
Joselito Adame, faena de tira y afloja ante un complicado quinto
Joselito Adame se estiró con el capote ante el segundo de su lote, ganándole terreno mientras calaba en los tendidos. Se alcanzó la faena de muleta, la cual inició con un ligero tanteo por ambos pitones para llevárselo y sacarlo del tercio. Empezó a torearlo al natural, primero uno a uno, marcando el trazo. No tardó en cambiar al pitón derecho, tratando de pasarlo, cambiando los terrenos, moviéndolo. Logró pasarlo en largo, encontrando una embestida incierta y desordenada a la que le buscó las teclas para desarrollar una faena de mucho mérito. Fue un tira y afloja continuo con un toro ajeno a las demandas de Joselito Adame, pasaba sin clase ni entrega. Culminó con una buena estocada. Le costó mucho cuadrarlo.
Cortés corta una oreja al sexto
Javier Cortés desarrolló un bonito y lucido saludo capotero ante el sexto de la tarde por verónicas con las que se lo fue sacando a los medios. Inició la faena genuflexo con un toro de movilidad y transmisión. Continuó por el derecho, encontrando continuidad y celo en las embestidas. Pero sería en el toreo al natural cuando dejará alguno de los pases de mayor acople, con suavidad y muy largos. El animal necesitaba tandas cortas, pero poco a poco se fue apagando, haciendo algún que otro amago por el derecho, obligando a Cortés a tocarlo con firmeza y mucha voz para fijarlo y pasarlo, evitando que lo sorprendiera. Daba la sensación de que el toro se aburría en la tela. Retomó las series al natural, las que tuvieron mayor calado en los tendidos, envolviéndoselo a la cintura, aprovechando los vuelos. Deslució con los aceros.
Nava de la Asunción. Toros de Albarrán. Los animales dieron juego y opciones para el triunfo, aunque con sus teclas, en una tarde en la que la terna abrió la Puerta Grande. Sergio Pérez de Gregorio, saludos y dos orejas; Joselito Adame, oreja y oreja; Javier Cortés, oreja y oreja.
