Enrique Ponce y Pepín Liria volvían a reencontrarse en una plaza de toros y lo hicieron a lo grande: la despedida del valenciano de La Condomina se convirtió en un repaso improvisado a la historia de dos toreros fundamentales en las tres últimas décadas. Hubo de todo… y para todos.
16 de septiembre de 2024/Luis Miguel Blázquez/Antonio Vigueras
Enrique Ponce y Pepín Liria volvían a reencontrarse en una plaza de toros, en este caso La Condomina de Murcia, en un día tan señalado como el Lunes de Feria, lidiando un encierro de Juan Pedro Domecq, Garcigrande, El Freixo y Hermanos García Jiménez.
Al final, la despedida del valenciano de La Condomina se convirtió en un repaso improvisado a la historia de dos toreros fundamentales en las tres últimas décadas. Hubo de todo… y para todos. Así os contamos la tarde toro a toro:
Ponce domina a media altura al blando primero, que no da opción de más, y le corta una oreja
Correcto estuvo Ponce con el primero de la tarde, un animal blando y descastado. Siempre lo llevó a media altura y provocándole la embestida. No le bajó la mano y siempre lo llevó pegado a la muleta para evitar que se saliese. Le dio varias tandas de derechazos y lo probó también por el pitón izquierdo. El toro fue a menos y aún así Ponce estuvo en la cara intentando sacarle muletazos de provecho. Dejó una estocada y paseó un apéndice.
Pepín, que saluda en chiqueros al segundo, le realiza una faena de raza y le corta la oreja
Pepín Liria se fue a recibir al segundo de la tarde a porta gayola, poniéndose la plaza de toros boca abajo con el murciano. Intentó lucirse con el toro a la verónica pero el animal salió abanto de chiqueros y le costó que se quedara en el capote, sacándoselo a los medios y dándole tres buenas chicuelinas. Tras el paso por el caballo y un puyazo muy breve, el toro parecía descoordinado pero poco le importó a Pepín. Le dio los tiempos necesarios y realizó una faena basada en la garra y el pundonor. Por el pitón derecho el toro no pasaba y le creó peligro hasta en dos ocasiones. Le cambió los terrenos y se puso por el pitón izquierdo, donde el animal tuvo más recorrido y se empleó más. Acabó la faena por circulares invertidos antes de dejar una pasada en falso y una estocada. Oreja.
Silencio para Ponce con el deslucido tercero
Deslucido fue el tercero de la tarde. El animal nunca tuvo afán de humillar, muy blando y justo de fuerzas. Tras el paso por el caballo, Ponce brindó la faena al respetable. Lo probó por ambos pitones pero el toro no terminó de romper. Abrevió Ponce. Silencio.
El esfuerzo de Liria se estrella contra el deslucido cuarto de la tarde
El cuarto de la tarde no remontó el vuelo y Pepín Liria no estuvo cómodo delante de la cara del animal. El toro fue otro animal sin fuerza y sin casta. Lo intentó el de Cehegín por ambos pitones, destacando algún natural suelto. Estocada que hizo guardia. Ovación.2
Faenón de Ponce al quinto, de vuelta al ruedo, al que desoreja en su adiós a La Condomina
Gran toro fue el quinto de Juan Pedro Domecq de nombre Gritón herrado con el número 48, que fue premiado con la vuelta al ruedo. El toro tuvo la condición de duradero, en una faena larga le aguantó todo lo que Ponce quiso hacerle. Ya con el capote se estiró a la verónica y tras un fuerte puyazo, quitó por chicuelinas. Brindó la faena al maestro Pepín Liria. Franela en mano comenzó por derechazos, y el de Chiva vio las cualidades del animal. Dos buenas tandas de derechazos valieron para poner al público en pie. Se cambió por naturales y lo llevó cosido a la muleta siempre a media altura sin bajarle la mano. La faena cogió altura y volvió de nuevo al pitón derecho donde dejó tres tandas que pusieron la plaza boca abajo. Terminó fajándose por bajo y aunque hubo petición de indulto, no fue correspondida por el presidente con acierto. Estocada trasera y dos orejas, en una amable despedida de Enrique por tierras murcianas.
Liria, un deleite en el sexto, al que desoreja
Pepín Liria salió a deleitar a su público con todo su repertorio. Se fue de nuevo a portagayola para recibir al sexto de la tarde. En el tercio le recitó dos nuevas largas cambiadas y se puso a torear por verónicas y chicuelinas. Brindó la faena al público y se puso de rodillas donde le dio dos circulares a diestras. El toro tuvo clase y repetición e hizo las delicias del público. Por el pitón izquierdo le templó la embestida y se vieron los mejores naturales de la tarde. Se pegó un arrimón final y se puso de rodillas. Con su público entregado la espada no quiso entrar en primera instancia, y a la segunda dejó media estocada caída. Dos orejas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de La Condomina, Murcia. Segunda de Feria. Corrida de toros. Menos de dos tercios de entrada.
Toros de Hermanos García Jiménez -primero y sexto-, El Freixo -segundo-, Garcigrande -tercero y cuarto- y Juan Pedro Domecq -quinto, Gritón de nombre, herrado con el número 48-.
Enrique Ponce, oreja, silencio y dos orejas.
Pepín Liria, oreja, ovación y dos orejas.