La emoción a caballo de Ventura y temple a pie de Ureña triunfan en Colmenar

27 de agosto de 2019/Marco A. Hierro/Fotos: Emilio Méndez

GALERÍA DE FOTOS

Una corrida mixta con Diego Ventura, Miguel Ángel Perera y Paco Ureña era la que se celebraba, en la tarde de este 27 de agosto, como cuarta de la Feria de los Remedios de la localidad madrileña de Colmenar Viejo. Se lidiaba un encierro Toros de María Guiomar Cortés Moura y Puerto de San Lorenzo.

Al primero lo recibió Ventura a lomos de Joselito para dejar dos rejones de temple máximo al ritmo del enorme animal. Con Guadalquivir comenzó el tercio de banderillas, clavando preciso, pero sobre todo templado mucho el galope de costado, con los pitones a dos dedos del estribo. Sensacional el caballero, cuya labor explotó, sin embargo, cuando sacó a Lío, pidió la música y se dedicó a pasar muy despacio por la cara, dejando palos casi sin espacio, casi a cámara lenta, ahora sí, con el tendido a reventar. Con Remate culminó la obra, con tres cortas y una rosa antes del rejonazo que precedió a la oreja.

El segundo se distrajo más en el capote de un Perera de gran quietud para saludarlo. Más centrado el toro en el quite por tafalleras, que llegó mucho más al tendido por su tremenda quietud. La tuvo también con la muleta, en la que empezó dejando miradas para adentro para que lo condujese con mucho poder el extremeño. Temple máximo para trazar sin un enganchón, para entregarse a la obra sin la entrega del toro, cuya nobleza no llegó nunca a la profundidad. Una estocada hasta las cintas propició la primera oreja para Perera.

Brillante estuvo Paco Ureña a la verónica en el saludo al tercero, al que le redujo la velocidad en un momento de máxima conexión con el tendido. La tuvo también en el quite, también a la verónica, pero fue más terrenal. Fue por el desfonde de un toro que, sin llegar a amarmolarse, se quedó muy parado para ligar las tandas, y tuvo que limpiar mucho Ureña antes de que se quedase en el momento de arrancarse en naturales sueltos. Y entonces sí los deslizó Paco de uno en uno, pero fueron contados. El buen tono general no dio más que para una ovación, después de pinchar reiteradamente.

Más parado salió el cuarto para que le dejase Ventura un solo rejón. Sin embargo, quiso que rompiese pronto el trasteo a lomos de Fino, que se metió por los adentros casi sin espacio y batió muy en corto de lado a lado de la plaza. Sensacional con Bronce, se dejó llegar los pitones a la grupa del caballo, caminó para atrás ante el avance zorrón del de Guiomar y batió casi sin espacio para clavar arriba y salir toreando. Inmenso. Pero la traca final llegó con Dólar y el par sin cabezada, que repitió ante el alborozo general. Bueno fue el nivel con las cortas al violin, y medio rejonazo certificó la muerte del toro. Una nueva oreja Le abría la puerta grande.

El quinto también se quiso ir de los embroques y acudió con brusquedad al caballo en una vara poco afortunada. Y la faena de Perera fue una auténtica lección de lidia y de búsqueda de bondades y fondo en la aspereza inicial. Limó Miguel las esquirlas y aplicó pulso innato y suavidad a la violencia que traía el toro hasta que terminó pegándole un par de tandas breves pero de muletazos largos. Una estocada rubrica a una o ra para profesionales que  en la plaza se quedó en ovación.

El que cerraba plaza marcó pronto la querencia a chiqueros, a pesar de los la brazos con que lo saludó Ureña. Sensacional fue el puyazo con que ahormó Pedro Iturralde al animal antes de embestir humillado y con entrada en el despacioso y templado quite a la verónica de Paco. Con la muleta Le faltó fondo al animal, pero no a Paco, que supo reconducir la informalidad inicial para terminar toreando muy despacio con la izquierda, de uno en uno y buscando siempre el mejor trazo. Una estocada contaría bastó para pasear el doble trofeo.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Colmenar Viejo (Madrid). Cuarta de Feria. Corrida de toros mixta. Media entrada en el numerado.

Toros de María Guiomar Cortés Moura y Puerto de San Lorenzo. Con ritmo pero a menos el enorme primero. Noble pero mirón el informal segundo. De buen aire y calidad sin fuelle el marmolillo tercero. Con codicia y ritmo el buen cuarto. Áspero y bruto el quinto. De buen fondo pero a la defensiva el sexto.

El rejoneador Diego Ventura: Oreja y oreja

Miguel Ángel Perera: Oreja y ovación

Paco Ureña: Ovación y dos orejas

Top