Juan Leal, Fernando Adrián, que confirmaba su alternativa en Francia, y Solal salieron en hombros en la última de abono de la Feria de Pentecostés, en la que se lidió un gran encierro -con un sexto bis de Fernay- del hierro sevillano de Virgen María, propiedad del francés Jean Marie Raymond.
20 de mayo de 2024/Stephan Guin/Fotos: Emilio Méndez
Juan Leal, Fernando Adrián, que confirmaba su alternativa en Francia, y Solal, hacían el paseíllo en la tarde de este Lunes de Pentecostés en el cierre de Feria en Nimes. Se lidiaba un encierro de Virgen María.
Se echó de rodillas sin dudarlo Fernando Adrián para saludar al toro de su confirmación, al que recibió por tres afarolados de hinojos, varios delantales y una buena media. Número 10 el toro, de octubre de 2019, fue un toro corpulento y estrecho de sienes, que luego desarrolló mucho peligro. Lo preservó en los dos puyazos Adrián, quitando por tafalleras Juan Leal; fue prendido en banderillas, sin consecuencias aparentes, el subalterno Marcos Prieto. Tras la ceremonia de la confirmación de alternativa, y en los primeros compases, embistió muy por dentro en cada viaje el animal. Lo intentó el madrileño por ambos lados, pero desarrolló mucho peligro, y no tenía ni un pase. Lo despenó de una estocada entera. Silencio.
El segundo toro, para Juan Leal, fue un animal de septiembre de 2019, número 36, de 525 kilos, un toro que abría la cara. Lo saludó por delantales y una tafallera el galo, sin poder lucirse totalmente de capa. Lo preservó en el caballo e inició faena en los medios con cambiados de rodillas por la espalda, dejando dos primeras series despaciosas sobre la diestra. El toro tenía buen viaje, pero le faltaba humillación y entrega. Toreó siempre el toreo por abajo en la primera parte de la obra, y cuando el toro se paró, conectó en la distancia corta por circulares frente a un toro soso y justo de raza. Tras una serie final, de rodillas en redondo, se tiró recto con la espada y desorejó al toro.
Número 17, de 516 kilos y de octubre de 2019 era el quinto, un toro muy bien hecho y astifino de cara. Se entregó de salida y lo recibió con buenas verónicas Solal; no se entregó mucho en el caballo el toro, siendo poco castigado. Variado palos en mano el nimeño ante un toro que, en la muleta, se entregó, pero le faltó un poco de fuerza. Solal intento torear despacio, sobre todo al natural, a un buen animal de Virgen María. En las cercanías, conectó con el tendido, dejando un gran espadazo. Oreja.
El cuarto toro, para Juan Leal, de 518 kilos y de septiembre de 2019, fue otro animal serio, con cara y astifino. Lo saludó a la verónica, pero se metió por dentro el toro. Poco castigado en el caballo, luego rompió su condición en una embestida importante, con prontitud, largura y bravo viaje. Un gran toro al que Leal, por ambos lados, ligó series de calado arriba. La plaza se volcó con la labor del torero, que cuando el animal se paró se metió con él en cercanías, llegando arriba. Se tiró muy recto de nuevo con el acero, dejando un espadazo en todo lo alto. Dos orejas tras aviso, la segunda protestada por el público.
Número 18 era el quinto, un toro negro, sergundo del lote de Fernando Adrián, animal bajo, astifino y serio. A ralentí toreó a la verónica el madrileño, llevándose al toro hasta los medios. Solal realizó un quite por chicuelinas y tafalleras, ante un toro con clase y humillación, un poco justo de fuerza. Comenzó la faena con dos cambiados por la espalda de rodillas, y siguió toreando en esa postura por la mano derecha. La siguiente fue otra buena serie por el derecho, pero mejores fueron las dos siguientes series al natural, con muletazos profundos. Remató la obra en la corta distancia, por circulares cantados por el tendido, y un espadazo en todo lo alto. Dos orejas.
El sexto toro tenía un problema motriz sobre el cuarto trasero anterior, y el sexto bis, del hierro de Fernay, fue un animal negro, nacido en marzo de 2020, de 520 kilos, largo y alto, astifino, al que saludó a la verónica y dos chicuelinas Solal. Puso un último palo de poder a poder muy bueno. Por alto comenzó la faena a un toro con transmisión, pero muy complicado, muy brusco y violento. No tenía un pase sobre el pitón izquierdo. Esfuerzo tremendo y entrega total, consiguiendo ligar tres buenas series con mucho mérito sobre la mano diestra. Remató la faena por manoletinas, un espadazo un punto delantero y caído. Dos orejas, la segunda generosa.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Nîmes (Francia). Última de la Feria de Pentecostés. Corrida de toros. Casi tres cuartos de entrada.
Toros de Virgen María y uno, el sexto bis, de Fernay.
Juan Leal, dos orejas y dos orejas tras aviso.
Fernando Adrián, que confirmaba alternativa, silencio y dos orejas.
Solal, oreja y dos orejas.
