La histórica ganadería protagoniza una carrera vertiginosa, con la manada partida en dos desde la calle Estafeta, donde ha habido huecos delante de los astados
14 de julio de 2023/Suertematador.com
La histórica ganadería de Miura ha cerrado este viernes los encierros de San Fermín en Pamplona con una carrera rápida (2’22’’) y sin heridos según las primeras estimaciones.
Como casi siempre, los toros de Miura han sido veloces y nobles, sobre todo en la última parte del recorrido, evitando los embistes a los muchos mozos que han ido encontrando por el camino.
Los miuras han empezado agrupados y a toda pastilla por Santo Domingo, donde se han topado junto a la hornacina con dos corredores, uno de ellos cruzando la calle de lado a lado de una forma peligrosa, a los que han ignorado por completo.
A mitad de la cuesta se han colocado por delante tres toros y un cabestro, imprimiendo un ritmo alto en la carrera que el resto de la manada tenía dificultades para aguantar, aunque sin descolgarse del todo gracias al esfuerzo de un cabestro que ha hecho todo lo posible para no perder contacto con el grupo delantero.
Han tomado bien la curva de Estafeta, donde se ha provocado un pequeño montón de corredores y ha habido varias caídas delante de los astados sin mayores consecuencias, a excepción de algunos pisotones.
Muy estirados, los miuras han enfilado la calle con el turbo puesto, en medio de una gran cantidad de corredores que no han querido perderse el último encierro de los Sanfermines.
Dos encierros en uno
Al comienzo de la Estafeta la manada se ha partido en dos, con los tres toros y el cabestro por delante y el resto por detrás, con una separación de unos diez metros después de una caída al principio de la calle que ya hizo imposible que los dos grupos de toros pudieran unirse.
Esto ha permitido a los mozos buscar los huecos cerca de las astas, lo que no ha resultado sencillo dada la velocidad de los toros de delante y de los de detrás.
En el tramo de Telefónica y en la bajada del callejón un miura se ha situado en el lado derecho limpiando el vallado, pasando muy cerca de las cabezas de los corredores, pero sin hacer amago de embistes.
Los primeros toros han completado el recorrido en poco más de dos minutos y lo que ha hecho que se alargara hasta los dos minutos y veintidós segundos ha sido la posterior entrada de sus hermanos a los corrales.