Una rotunda Olga Casado corta las dos orejas y el rabo en una emotiva y solidaria tarde en la que Alejandro Talavante y Fernando Adrián cortaron dos orejas
1 de diciembre de 2024/Patricia Prudencio Muñoz
Vistalegre celebraba el festival benéfico por los afectados de la DANA, un festejo en el que los matadores de toros Enrique Ponce, Sebastián Castella, José María Manzanares, Alejandro Talavante, Fernando Adrián y Andrés Roca Rey, junto con la novillera Olga Casado se midieron a los novillos de las ganaderías de Garcigrande (1°,2° y 7°), Jandilla (3°), El Freixo(4°), Domingo Hernández (5°) y Núñez del Cuvillo (6°). Enrique Ponce desarrolló una faena de clase en la que encontró mayor expresión por el pitón derecho ante un novillo con el que no se pudo exceder. Castella derrochó torería en una faena basada en el temple y la despaciosidad, sin llevarle la contraria a un novillo que marcó la querencia desde el principio. Manzanares no tuvo opciones con el tercero, un novillo de Jandilla sin clase ni entrega y de embestida incierta. Talavante cortó las dos orejas al cuarto, un gran novillo de El Freixo al que exprimió y cuajó el extremeño. Fernando Adrián cortó las dos orejas tras una faena de máxima expresión en la que también exprimió a un buen toro de Domingo Hernández, al que también exigió. Roca Rey mantuvo un tira y afloja con el de Núñez del Cuvillo, un novillo que pasaba y obedecía, pero al que le faltaba clase y pulcritud en su embestida. Olga Casado cortó las dos orejas y el rabo y derrochó rotundidad y determinación en una faena de muchos matices ante un buen ejemplar de Garcigrande, al que cuajó desde el inicio.
Ponce, vuelta al ruedo tras una faena de clase
Abría la tarde Enrique Ponce con un novillo de Garcigrande, al que saludó por verónicas bien llevadas que fueron ovacionadas. Tuvo un inicio de faena muy torero con el que lo fue sacando a los medios, llevándolo por abajo. Continuó sobre el pitón derecho, en una tanda suave y lenta en la que lo pasó a media altura, ayudándolo en la salida. Cambió al pitón izquierdo, con un toreo al natural llevado ante el que el animal no se terminó de entregar, ofreciendo una embestida irregular y desclasada. Ponce insistió y uno a uno, con firmeza y poder lo llevó. Retomó el pitón derecho, pudiéndo encajarse con el y encontra mayor lucimiento y expresión. El novillo estaba justo de fuerza. Culminó con algún que otro pase genuflexo y una estocada al segundo intento.
Castella corta la primera oreja de la tarde
Castella recibió al segundo, también de Garcigrande, un novillo incierto por el pitón derecho en el capote, metiéndose por dentro. Remató su saludo con torería. El diestro francés brindó al cielo e inició su faena por alto, en la raya, pero se le fue suelto, por lo que tuvo que ir tras el. Logró sujetarlo y dejar un inicio de faena con el que cautivó a los tendidos. Continuó sobre el pitón derecho, a media altura para bajarle paulatinamente la mano y envolvérselo a la cadera en un toreo lento y cadencioso. Encontró acople en aquella faena templada. Cambió al pitón izquierdo y lo intentó, pero le salía suelto, totalmente ajeno a sus demandas, así que se fue a las tablas, donde logró llevarlo y pasarlo para configurar aquellas tandas al natural. Hubo nobleza y una embestida permisiva por el pitón derecho, pitón que recuperó rápido. Encontró el acople y el compás al que llevarlo, entre pausas, permitiendo que se recuperase y volviera a la tela para emplearse. Terminó marchándose a la querencia, sin que Castella le llevará la contraria, dándole lo que necesitaba. Sin embargo, cada vez era más complejo ligar los muletazos.
Manzanares, sin opciones con el tercero
Manzanares llevó entre verónicas al tercero de la tarde, un novillo de Jandilla que le permitió la expresión en el capote. Se alcanzaba el tercio de muleta y el alicantino lo recibió en la muleta con un ligero y breve tanteo. Se decidió por el pitón derecho, sin embargo, el animal era incierto, se metía por dentro y le costaba atender a las demandas del diestro. Tuvo que aprovechar la inercia para tirar del animal y darle continuidad a las tandas. Lo intentó al natural, pero no pasaba e incluso hizo por él, no le gustaba sentirse podido, moviéndose a base de arreones, con una embestida sin clase ni entrega que no le brindó opciones a Manzanares. Lo mató al segundo intento.
Talavante corta las dos orejas a un gran novillo de El Freixo
Talavante desarrolló un lucido y variado saludo capotero con el cuarto, un novillo de El Freixo. Se fue a los medios para brindar al público y después iniciar su faena en el tercio, pasándolo a pies juntos, poniendo de acuerdo al tendido. Eligió el pitón derecho para continuar en una tanda de acople en la que trató de suavizar aquellas salidas bruscas. No esperó para cambiar al toreo al natural, llevándolo con mayor suavidad, abriéndolo, dándole mayor amplitud al trazo, llevándolo cosido a los vuelos. Dejó naturales de sabor y mucha torería. Intercaló una tanda por el derecho, para después continuar por el izquierdo. Basó su faena en la despaciosidad, dejándosela muy puesta, llevándolo con mucha suavidad, redondeando así su faena, exprimiendo y cuajando a un novillo noble y totalmente entregado que mostró calidad y que siguió la franela. Mató con acierto y rotundidad a un novillo que se tragó la muerte aguantando en el tercio.
Fernando Adrián corta las dos orejas tras cuajar una importante faena a un novillo de vuelta al ruedo
Fernando Adrián se midió al de Domingo Hernández, con el que no pudo estirarse en un saludo capotero incierto, se le quedaba y miraba. Se alcanzó la faena de muleta y Fernando Adrián se fue a los medios para recibirlo en la franela de rodillas. El animal atendió en la larga distancia y logró encelarlo, envolviéndoselo. Se levantó y siguió con un toreo de transmisión y poder con el que metió de lleno a los tendidos. Siguió con un toreo largo y profundo lleno de sabor y mucha torería, imponiéndose a un animal que se entregó y siguió con celo el engaño. Un sinfín de embestidas que dosificó y supo llevar, en tandas que inició en la larga distancia para después acortarla y envolvérselo, llevándolo totalmente metido en la tela. Lo exprimió y sacó todo lo que llevaba en una de máxima expresión, incluso cuando el de Domingo Hernández se le fue a tablas. Culminó genuflexo y un estoconazo.
Roca Rey, un tira y afloja ante el de Núñez del Cuvillo, con el que acortó distancias
Roca Rey bregó y llevó al de Núñez del Cuvillo, ganándole terreno hasta sacarlo del tercio. Se pudo lucir en el quite con el capote a la espalda. Se fue a los medios y brindó desde aquellos terrenos, sin embargo, se fue al tercio para recibir en la muleta al novillo. Lo hizo a pies juntos, sin rectificar ni un milímetro. Eligió la mano derecha para continuar, pero antes tiró del animal para sacarlo a los medios. Le corrió la mano tratando de encontrar acople, templando las embestidas, pasándolas de una en una. No tuvo prisa, basando su faena en la despaciosidad, con pausas entre series. El de Núñez del Cuvillo seguía la tela, aunque con ciertas impurezas, no siendo uniforme, soltando la cara, moviéndose a base de arreones. Cambió al natural en una tanda lenta en la que trató de alargar el trazó, llevándolo con los vuelos, abriéndolo, pero sin terminar de redondearlo. Le faltó cierta clase a la embestida, pero Roca le robó las embestidas y se metió entre pitones, a pesar de que ya no pasara.
Olga Casado corta las dos orejas y el rabo tras cuajar su faena al séptimo
Olga Casado dio un recital de capote ante el de Garcigrande que no dejó a nadie indiferente. También buscó el lucimiento en el quite, echándose el capote a la espalda. Tomó la muleta y se fue directa a Isabel Díaz Ayuso para brindarle. Después se dirigió a los medios para recibir al séptimo de la tarde. Continuó sobre el pitón derecho, tocándole con firmeza a un novillo que atendió en la larga distancia. Se la dejó puesta, aprovechó la inercia y lo llevó cosido a la tela, desarrollando una serie ligada y lucida con la que llegó a los tendidos. Mostró un trazo largo y profundo en un toreo suave y cadencioso repleto de matices. Cambió al natural cuajando aquellas series, a las que le siguieron el toreo en redondo de rodillas. Desarrolló una faena completa y rotunda ante un gran ejemplar de Garcigrande, con el que se encajó y expresó. Poco a poco se fue quedando más corto, a pesar de que seguía atendiendo a las demandas de Olga. Cerró por poncinas, manoletinas y una estocada en la que se tiró con todo.
Vistalegre. Novillos de Garcigrande (1°,2° y 7°), Jandilla (3°), El Freixo (4°) premiado con la vuelta al ruedo, Domingo Hernández (5°) y Núñez del Cuvillo (6°) para Enrique Ponce, vuelta al ruedo; Sebastián Castella, oreja; José María Manzanares, ovación; Alejandro Talavante, dos orejas; Fernando Adrián, dos orejas; Andrés Roca Rey, ovación; Olga Casado, dos orejas y rabo tras aviso.
Incidencias:
Antes de que se realizará el paseíllo, la banda de música salió al ruedo junto con el El Soro y Francisco para realizar una sentida interpretación del himno de Valencia. Una vez hecho el paseíllo se guardó un minuto de silencio por las víctimas de la DANA y sonó el himno de España. Además, Ponce sacó a todos sus compañeros a saludar.