Triunfan Ferrera, Pastor y D´ Guadiana tras la corrida mixta de Nuestra Señora de Belén en Real de Asientos

25 de enero de 2025/Adiel Armando Bolio/Foto: Francisco Vargas

Ante un casi lleno en el centenario coso “Renacimiento” en tarde de agradable clima y fresca al final, con motivo de las fiestas en honor a Nuestra Señora de Belén, en su CCC aniversario, se dio una corrida mixta en la que resultaron como triunfadores Antonio Ferrera, José María Pastor y la ganadería de D’ Guadiana, saliendo en hombros los dos matadores y dando vuelta al ruedo el representante de la dehesa, don Héctor Saucedo.

Previo al paseíllo, se dio el recorrido por el ruedo del pendón que llevaba a la patrona de Real de Asientos, Nuestra Señora de Belén, seguida por los matadores y sus respectivas cuadrillas, para luego escucharse oraciones encomendándonos a ella.

Se lidiaron un becerro y cuatro astados de la dehesa zacatecana de D’ Guadiana, siendo complicado el becerro. De los toros, el tercero fue muy bueno para ser indultado, de nombre “Oro Puro”, número 27 y con 480 kilos. El segundo fue aplaudido en el arrastre, el primero fue bueno, pero de poca fuerza y, el cuarto, terminó rajándose.

Abrió el festejo el aspirante a torero acalitense Santiago Ortiz, alumno de la Academia Taurina Municipal de Aguascalientes «Alfonso Ramírez ‘El Calesero'», quien se vio empeñoso al manejar el capote. Su labor muleteril, a un becerro no fácil, le puso esmero por ambos lados a pesar de los achuchones. Al final, simuló la suerte de matar utilizando una banderilla, siendo aplaudido.

En la lidia normal, el balear Antonio Ferrera, a su primero, llamado «Minero», noble y agradecido, pero de poca fuerza, lo lanceó bien a la verónica. Con la muleta, tras brindarle al alcalde anfitrión, el ingeniero José Manuel González Mota, Antonio realizó una faena talentosa y torera por ambos lados, empezando a media altura, ayudando al «socio» para, después, bajarle la mano en artísticos y templados lances, muy a su estilo y que le jaleó la gente. Ha sido un trasteo de evidente paciencia y conciencia para saber darle al buen astado su tiempo y su espacio. Mató de pinchazo y estocada desprendida y trasera para obtener una oreja.

En su segundo, «Oro Puro», número 27 y con 480 kilos, de estupendo juego, Ferrera jugó bien los brazos en lances a la verónica y quitó vistosamente por navarras. Buena puya del piquero Mauro Prado. Ferrera se hizo cargo del segundo tercio invitando a su alternante José María Pastor y al subalterno Fernando García para ser sonoramente ovacionados. Con la pañosa, Antonio ejecutó una faena que contuvo arte, lentitud y personalidad en tandas de impecable trazo, acompañamiento y dimensión por los dos pitones, entendiendo a cabalidad la bondad y la clase del «socio». Se recreó Ferrera en todos y cada uno de los muletazos, incluyendo toreros adornos, en medio del contento de la concurrencia. La obra taurina conjuntada entre torero y toro fue larga y de gran nivel. Hubo petición de indulto y este se concedió entre la algarabía general, siendo para el torero los máximos trofeos simbólicos y dando triunfal vuelta al ruedo acompañado del representante de la ganadería, don Héctor Saucedo y el picador Mauro Prado.

El estatal José María Pastor, en su primero, «Tepozán» de nombre, de buen desempeño, lanceó bien a pies juntos y mejor quitó por fregolinas. Cubrió voluntarioso el segundo tercio entre aplausos y, con la sarga, inició dando pases para medirle los lados al toro y, entonces, darse a estructurar una faena variada, templada y rítmica tanto por derechazos como por naturales de buen calado, siendo correspondido por el público con fuertes aplausos. Serie de derechazos y los de pecho en un palmo de terreno para cerrar y terminar de estocada trasera y desprendida para recibir las orejas.

Y en el toro que cerró plaza, noble de principio, pero, distraído y rajado al final, Pastor se lució al veroniquear enclasado y mejor quitó por tafalleras. Buena vara del montado Miguel Cobos. En el segundo tercio correspondió a Antonio Ferrera invitándolo para hacerse ovacionar los dos. Con la muleta, José María empezó por alto, rodilla en tierra, para seguir en una labor de buen toreo por ambos perfiles, destacando sus esforzadas series diestras. Mató de estocada tendida hasta el tercer viaje y cinco golpes de descabello, doblando solo el toro, para ser aplaudido.

Al finalizar el festejo, Antonio Ferrera y José María Pastor fueron paseados en hombros, quienes se hicieron acompañar por el aspirante a torero Santiago Ortiz.

 

FICHA

LUGAR: Real de Asientos, Aguascalientes.

EVENTO: Feria de Nuestra Señora de Belén, en su CCC aniversario.

PLAZA: Centenario coso “Renacimiento”.

ENTRADA: Casi lleno, en tarde de agradable clima y fresca al final.

GANADO: Un becerro y cuatro astados de D’ Guadiana, siendo complicado el becerro. De los toros, el tercero fue muy bueno para ser indultado, de nombre “Oro Puro”, número 27 y con 480 kilos. El segundo fue aplaudido en el arrastre, el primero fue bueno, pero de poca fuerza y, el cuarto, terminó rajándose.

CARTEL: El aspirante a torero Santiago Ortiz: Palmas. El balear Antonio Ferrera: Una oreja y dos orejas y rabo simbólicos por indulto. José María Pastor: Dos orejas y palmas. Al final, Ferrera y Pastor, acompañados de Santiago, salieron en hombros.

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