Los ejemplares toreados en suelo apizaquense procedieron de la afamada ganadería zacatecana de Valparaíso y le han servido de mucho
7 de abril de 2021/Suertematador.com
El novillero queretano Juan Querencia anda más que metido en el campo bravo y plenamente concentrado en su preparación de cara a su próxima reaparición vistiendo el terno de luces, por lo que todo hace suponer que la seria lesión que sufrió en diciembre pasado en la mano y brazo derecho ya quedó totalmente en el olvido.
Ahora, además de las rutinas de ejercicio físico que realiza a diario para estar en óptimas condiciones, su alistamiento taurino está siendo primordial para cada día estar puesto a punto y listo para cuando se le requiera en una plaza de toros.
Es por ello que su administración nos informa que el reciente domingo 4 del mes en curso el prometedor novillero se trasladó al cortijo del rancho La Escondida, en Apizaco, Tlaxcala, de la familia Ortega, para lidiar de inicio un astado y que, al final, porque así lo quiso el destino, terminara toreando dos ejemplares sobre los 300 kilos de peso y que le han servido de mucho a Querencia.
Esto de lidiar ese par de astados, según se cuenta, es debido a que hace poco más de dos semanas en la dehesa potosina de José Garfias se encontró Juan con dos aficionados ecuatorianos, Javier y Gabriel Valencia, padre e hijo respectivamente, quedando el primero de ellos más que complacido con el novillero por su desempeño con las vacas y de ahí nacer la idea para invitarlo a la ya citada sesión torera en La Escondida.
Así que el reciente domingo, en el mencionado coso apizaquense, se lidiaron cinco bureles de la dehesa zacatecana de Valparaíso, encargándose de ello los personajes sudamericanos y aficionados prácticos Javier y Gabriel, éste de 15 años de edad y el hijo del colega Rafael Cué, Iker; además del mismo Juan Querencia. Los ejemplares se dejaron torear y en lo que al novillero se refiere, admite haberse sentido más que desenvuelto en la cara de los animales, lo que lo ha motivado a no bajar el ritmo en su alistamiento y seguir adelante con gran entusiasmo y determinación.
Veladamente, se puede decir que esta relación establecida entre Querencia y la gente de Ecuador, le puede ayudar para en algún momento, más adelante, ir a ese país a hacer su presentación y, si no, dejémoslo al tiempo. ¡Enhorabuena y suerte matador!