2 de noviembre de 2024/Suertematador.com/Fotos: Manolo Briones – NTR Toros
Los matadores de toros Ernesto Javier “Calita”, y Román Collado, firmaron una brillante actuación hoy en San Miguel de Allende, donde se llevó a cabo, por vez primera, la corrida del Día de Muertos, una fecha nueva que la empresa Feria Toro tiene intención de convertir en otra cita importante del calendario taurino de la centenaria plaza “Oriente”, en la que también el rejoneador de dinastía Fauro Aloi cortó una oreja de peso al segundo toro de su lote, tras una gran faena.
Delante del primer toro de la ganadería de Marrón que fue noble, pero que se agarró un tanto al piso, Fauro siempre buscó pisarle el terreno para encelarlo y así consiguió entusiasmar al público desde que lo recibió montando a «Mangérico». Después sacó a “Faraón” para colocar banderillas con mucha exposición. En uno de los cites yendo hacia atrás, y «Faraón» le cayó encima de manera aparatosa, provocándole un fuerte golpe en la rodilla izquierda.
Sin importar este desaguisado, y no habiendo sufrido mayores lesiones, se sobrepuso para concluir la lidia sobre los lomos de «Maximus», un caballo nuevo que está probando para matar, señaló un pinchazo y un golpe de descabello para saludar una ovación en el tercio, antes de ingresar por su pie a la enfermería para ser atendido con analgésicos y un vendaje con hielo para reducir la inflamación.
En el cuarto toro de la tarde decidió sacar a «Chato» para recibir, no obstante que era el caballo que estaba utilizando para el tercio final, y se despeñó con soltura delante de un toro bueno, que galopó con franqueza y se prestó más al lucimiento que el primero, por lo que la labor de Fauro fue todavía más redonda y emocionante por el ceñimiento en los embroques y la expresión de su toreo.
En el tercio de banderillas, a los lomos de «Favorito», ejecutó dos quiebros extraordinarios que entusiasmaron a la gente, y remató la faena toreando de costado con temple sobre los lomos de “Atila”. Para matar volvió a sacar a «Maximus» para colocar una banderilla al violín y una corta, previo a dejar un rejón de muerte eficaz, pero un tanto trasero, que fue la mácula que le impidió cortar una segunda oreja. Fauro regresará a la Ciudad de México para someterse a una resonancia magnética de la rodilla izquierda, para poder determinar el alcance de la lesión.
El tiempo de “Calita”
No cabe duda que el torero mexiquense Ernesto Javier “Calita” atraviesa un gran momento de su carrera profesional. Madurez, y una facilidad se refleja en un toreo pausado donde la clase sobresale y se antepone. La tarde firmada en San Miguel de Allende ha sido importante, de momentos con letras mayúsculas. Han sido dos toros de muy diverso comportamiento, y por eso las faenas han tenido un corte muy distinto, pero se reflejó el trazo largo, profundo, el que se acompaña con la cintura y se plasma con una gran calidad y empaque. La muleta muy baja en la faena del primero, cortando una oreja -con petición de la segunda- a “Cuchillero”, de 483 kilos, de la ganadería de Marrón. La variedad con el capote y una faena asentada permitieron el lucimiento del torero mexiquense que cuajó series templadas, destacando las series finales por el izquierdo. Pasaportó de buena estocada.
La cadencia de Román
Román Collado cortó las dos orejas de “Pochito”, de 470 kilos, que fue merecedor del arrastre lento por su nobleza y calidad. Román que tuvo variedad con el capote, gustando en el saludo que interpretó. A pies juntos y por alto, Román dio inicio a su labor con la muleta, ante el buen toro que ha tenido ese fondo de nobleza. Apuntó mejores condiciones por el derecho, pudiendo por momentos profundizar en su toreo, mostrando la calidad que aquilata, siempre con el sitio y el temple por delante. Mató de gran estocada y cortó las dos orejas mientras que el toro fue merecedor del arrastre lento.
FICHA DEL FESTEJO. San Miguel de Allende, Gto.- Plaza “Oriente”. Corrida del Día de Muertos. Media entrada, en tarde agradable. Toros de Marrón (1o. y 4o., rejones), correctos en presentación, de juego variado, de los que sobresalió el 3o., por su calidad y fue premiado con arrastre lento. El rejoneador Fauro Aloi: Ovación y oreja. Ernesto Javier Calita: Oreja y oreja. Román: Dos orejas y silencio.