Víctor Cerrato abre la Puerta Grande en una tarde en la que Bruno cala con grandes faenas sin acero en Trillo

22 de junio de 2025/Mar Muñoz

Trillo celebró una novillada picada con novillos de Baltasar Ibán (1°, 5° y 6°) y Guerrero y Carpintero ( 2°, 3° y 4°) para los novilleros Víctor Cerrato, Bruno Aloi y Cid de María. Una novillada con carácter benéfico, cuya recaudación fue íntegramente a la Fundación Elena Terre, que trabaja a favor de los niños y niñas enfermos de cáncer y osteosarcoma.

Víctor Cerrato pasó a pies juntos y con quietud a «Peletero» de Baltasar Ibán en su capote. De rodillas y en los medios comenzó su faena, pasándolo por ambos pitones sin probaturas. Siguió en redondo por el pitón derecho, para después cambiar al natural, dejando una tanda reconocida en el tendido. El animal era pronto, pero también muy pegajoso, por lo que descomponía la embestida cuando tocaba la tela. Retomó el pitón derecho y lo prendió feamente, aunque sin aparentes consecuencias. Volvió a la cara, llevándolo por el pitón izquierdo, perdiéndole pasos, pero sin lograr hacerse con la embestida de un novillo que lo estaba avisando. Retomó el derecho con torería, pero ya pasaba sin emoción alguna, por lo que Cerrato intentó ponerla alternando pitones. Hizo su epílogo al natural, lo colocó en suerte y dejó una estocada entera, defectuosa pero efectiva.

Bruno Aloi recibió a «Presumidillo» de Guerrero y Carpintero en su capote con un recital de verónicas y también realizó un lucido quite. Brindó al respetable y en el tercio lo pasó por ambos pitones, sacándolo a los medios con torería y temple. Siguió por el derecho y con pierna atrás le iba llevando en redondo hasta que lo desarmó. Retomó su faena por ese pitón, ligando los pases, enroscándose con el. Le citó de lejos para seguir con un pase de las flores y se lo llevó por delante sufriendo una fea voltereta, de la cual se recompuso y volvió a la cara con vergüenza torera. Cambió al natural dejando una tanda reconocida en el tendido. El animal se iba viniendo a menos y Bruno no quiso alargar, así que con la muleta planchá y girando sobre sí mismo dejó muletazos dotados de clase, cerrando su actuación genuflexo rezumando torería. Falló con la espada, teniendo que usar el verduguillo.

Cid de María se estiró a la verónica con «Lanzavida» de Guerrero y Carpintero. Con un galleo por chicuelinas llevó al novillo al caballo, luciéndose, gustando. Por el pitón derecho comenzó su faena, ligando y bajándole la mano a un novillo que seguía el engaño sin terminar de humillar. Cambió al natural y perdiéndole pasos le fue metiendo en su muleta para después pararse con el, dejando la pierna atrás y empezar a ligar los naturales. Le dio tiempo y retomó el pitón derecho ligando una buena tanda. sin embargo, quiso volver al natural para cerrar con una tanda de peso. Culminó por bernadinas y lo colocó en suerte. La estocada la logró al tercer intento mientras escuchaba un aviso.

Víctor Cerrato a la verónica paró a «Galopo» de Guerrero y Carpintero en su capote. A pies juntos lo pasó por ambos pitones, probándolo para seguir en rodillas para comenzar su faena. Siguió por el pitón derecho con pases con poso, para después cambiar al pitón izquierdo, dándole el pecho y tirando de el intentando ligar los muletazos. Montó la muleta y lo fue pasando en ella con torería y variedad. Sin emabrgo, el animal sacaba la cara alta, desluciendo el trazo. Toreó con la mano derecha sin ayuda, aguantando. Volvió a montar la muleta queriendo poner la emoción en las distancias cortas. Dejó media suficiente.

Bruno Aloi bregó genuflexo con «Gallito» de Baltasar Ibán en su saludo capotero. Quiso comenzar su faena genuflexo en el tercio, pero lo desarmó. Volvió a la cara del animal sobre el pitón derecho, obligándolo por abajo, girándole la muñeca y llevándolo en redondo con firmeza y temple. Cambió al natural y de uno en uno iba metiendo en su muleta, a un novillo que no tenía interés en el engaño, no se entregó. El mexicano tuvo que poner el lucimiento que le faltaba a su adversario. El de Baltasar Ibán no tenía nada más que ofrecer y Bruno metió una estocada entera, pero el novillo tardó en doblar y se enfrió el tendido.

Cid de María bregó obligando a «Arbolario» de Baltasar Ibán. Inició la faena genuflexo, sacándolo y probándolo para seguir sobre el pitón derecho de un animal que tenía una embestida descompuesta. No se terminaba de acoplar con el, a pesar de llevarlo a media altura e intentar ligar los pases, pero le punteaba la tela, descomponiendo y desluciendo. Tomó la muleta con la mano izquierda presentado la misma condición y no conseguía encontrar la ligazón. Alternó pitones buscando dar forma a su faena. A la tercera y dos descabellos dobló el novillo.

Trillo. Guadalajara. Novillos de Baltasar Ibán y Guerrero y Carpintero para Víctor Cerrato, oreja y oreja tras aviso; Bruno Aloi, aplausos tras aviso y aplausos tras dos avisos; Cid de María, aplausos tras aviso y silencio.

 

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